Fíjate bien en estas fotos. Son inesperadas, cogidas al azar por la gran fotógrafa Gema Cristóbal. ¿Qué diferencia hay entre el ojo del talento y el del montón de fotografías de andar por casa? Eso, la emoción, el instante, la alegría, el ojo que capta la intimidad, la mirada cómplice, el secreto de lo que no se cuenta, pero se ve…, la luz, la inteligencia.
Hace muchos años, siendo yo una reportera en el periódico de mi tierra, ALERTA, con apenas veinte años, aprendí lo que significada ser un buen fotógrafo: cazarlas al vuelo, intuir una emoción, expresar un momento, que no se te vaya el objetivo de la noticia. Desde entonces lo aprecio, lo valoro, lo distingo.
A mi me gusta el talento, esa actitud que te permite ver donde solo tú eres capaz de mirar; me encantan estas fotografías hechas por Gema Cristóbal, una gran fotógrafa amiga de nuestro autor, Gabriel Mulet Panizza, un ilustre mallorquín, que además de escribir, pinta, canta y ocupa un cargo como ejecutivo en la empresa Coca Cola.
Estamos en Avd de Asturias 44, en el acto de presentación de su libro, editado por el sello Medialuna. De acuerdo que son momentos emocionantes; pero las instantáneas realizadas por Gema Cristóbal tienen mucho brillo. Me gusta cómo se refleja la emoción, las sonrisas del autor. Me encantan estos momentos llenos de magia y complicidad, de una noche memorable en nuestro espacio Medialuna, rodeada de amigos, de profesionales muy diversos.
Por cierto, no se puede ser más guapo. ¿O sí? No dejen de leerle. Su novela es un auténtico regalo para las noches de insomnio, La trama Schäfer, vale tanto como su artífice.